El hielo quemó el suelo
de mi presente
ausente
de juegos.
Destinos con desatinos,
inmensos lagos de ayeres
con los perdídos placeres
divinos.
Arden los recuerdos
en la hoguera del sueño,
sin más dueño
que el ausente
pasado perdido.
Hilos de fantasía
mantienen mi marioneta
ahora más quieta,
tal vez en demasía.
Ariatiz
01.29.2016